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Informe “ViewPoint” – Economía Circular

¿Cómo están haciendo la transición las empresas?

No hay estrategia sin objetivos

En 2018, el Consejo Empresarial Mundial para el Desarrollo Sostenible (WBCSD) publicó un análisis del panorama de las métricas circulares, en el que se observaba un patrón en la forma en que las empresas medían y comunicaban sus logros en materia de economía circular. Ese estudio recogió que el 70 % de las métricas circulares utilizadas en ese momento estaban clasificadas como indicadores de "Fin de Vida" u "Operaciones", como las tasas de reciclaje y los residuos desviados del vertedero. A modo de comparación, los indicadores de la fase de diseño, distribución y uso solo representaban el 11% del total de las "métricas circulares" observadas en aquel momento. 

Este análisis del panorama informó de la dirección de lo que se convertiría en los Indicadores de Transición Circular (ITC), que se publicarían en su primera iteración CTI v1.0 en enero de 2020. Desde entonces, el Consejo Empresarial Mundial para el Desarrollo Sostenible (WBCSD) ha publicado la CTI CTI v2.0 a principios de este año y ha integrado todas las actualizaciones del marco en la herramienta CTI gratuita y en línea en www.ctitool.com.

De los encuestados que miden su circularidad en la actualidad, la CTI se utiliza el doble de veces en las empresas pequeñas y muy pequeñas, en comparación con las grandes y muy grandes, lo que demuestra su accesibilidad.

Sin embargo, la gran mayoría de los encuestados (65,6%) que miden su circularidad siguen utilizando sus propios indicadores y KPI circulares. El reto que esto supone es que, una vez que esos KPI se comunican más allá de las cuatro paredes de la empresa, incluidos los inversores, los clientes y las principales partes interesadas, la interpretación es difícil.

Sin embargo, mientras que el 55,7% de los encuestados ha establecido objetivos y metas sobre la circularidad, solo el 43,9% ha determinado ya una línea de base de rendimiento circular. Reconociendo la importancia de utilizar los datos para impulsar la toma de decisiones en el ámbito empresarial (incluida la sostenibilidad), las empresas tienen margen de mejora a la hora de establecer una línea base de rendimiento circular antes de fijar objetivos adecuadamente ambiciosos. 

Hasta que las empresas no comprendan una línea base de rendimiento circular objetiva, los esfuerzos de la economía circular seguirán siendo de nicho, ad hoc y no podrán impulsar la escalabilidad e influir en la estrategia de las organizaciones. Al final, esto puede suponer un riesgo para las empresas de ser percibidas como un (circle washing) "lavado de círculos", ya que la medición se centra más en las comunicaciones que en la toma de decisiones estratégicas. 

¿En qué punto de la Curva de Madurez Circular se encuentra su empresa? 

Dependiendo de la región, el sector y la posición en la cadena de valor, es probable que una empresa se encuentre en una fase de la Curva de Madurez Circular similar a la de sus semejantes. Esto ofrece una oportunidad para reflexionar de forma exhaustiva sobre las acciones y ambiciones que tiene la empresa para avanzar hacia la circularidad. En última instancia, la importancia de medir el rendimiento de referencia de la circularidad de la empresa es pequeña en comparación con su mejora en el tiempo.

No podemos avanzar en nuestra transición circular sin saber cuál es nuestra situación actual. Los gobiernos, desde los municipales hasta los nacionales, y las empresas, desde las pymes hasta las multinacionales, se verán sometidos a una presión cada vez mayor para saber no solo en qué punto se encuentra la circularidad, sino también para trazar un camino hacia la disociación del consumo de recursos y el rendimiento económico.  

Figure 1 Circular Maturity Curve of a Typical Company. Adapted from WBCSD & BCG's The New Big Circle Report (2019)

Autor: Brendan Edgerton - Director, Economía Circular, WBCSD 

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